Ahriy'i

[ˈa.hɾij.ʔi] AHRIY’I –nom. [Origin ap. -3000 Imperial, del Trokh ahriy “orgullo, familia extensa” + ’i “de, perteneciente a”]. Lider matriarca Aslan.

Las Ahriy’i son las matriarcas familiares de los clanes aslan. En una cultura donde el linaje se hereda por vía paterna pero la gestión operativa recae en las mujeres, las Ahriy’i constituyen la columna vertebral funcional de cada unidad familiar.

No se trata de una única líder por clan, sino de una red distribuida de matriarcas que gobiernan, organizan y transmiten la continuidad de su grupo familiar. Cada enclave, nave o instalación significativa lleva consigo su Ahriy’i: una autoridad reconocida, con competencia sobre decisiones internas, gestión de recursos y representación del clan en el exterior.

Rol Social

Las Ahriy’i no ostentan poder formal sobre el conjunto del clan, pero sí control total sobre su célula familiar inmediata. Esta descentralización permite que múltiples ramas del mismo clan operen simultáneamente en lugares distintos, cada una bajo el liderazgo de su matriarca respectiva.

En especial, los clanes Iloahktahe —a menudo marginados del sistema formal del Tlaukhu— dependen de sus Ahriy’i para asegurar su existencia operativa. Sin una Ahriy’i, una célula aslan pierde cohesión, dirección y legitimidad.

Toda instalación, nave o asentamiento que carezca de una Ahriy’i activa es vista como incompleta, en riesgo o en situación excepcional. Su muerte sin descendencia femenina marca el fin funcional de la célula familiar.

Ahriy’i en el Juego

En The Corporate Wars, las Ahriy’i representan una ventaja estructural para las Políticas aslan: no necesitan contratar personajes de mando para operar en otros mundos. Cada despliegue incluye su propia autoridad, perfectamente integrada y legítima.

Esto otorga a las Políticas aslan una autonomía táctica que otras Lealtades solo pueden lograr mediante personal adicional, entrenamiento costoso o mecanismos de delegación complejos.

Las Ahriy’i son personajes activos desde el inicio. Su presencia garantiza operaciones fluidas, cohesión interna y toma de decisiones inmediata.

Jugar con esta estructura no es solo una cuestión de eficiencia: es una forma de encarnar el espíritu aslan, donde cada célula del clan lleva consigo su historia, su propósito y su matriarca.